El SEO ha muerto
Siempre se habla de una serie de variables concretas que son las que el “bot” rescata de una web y envía a la base de datos de google. Se habla de una búsqueda específica de la que google extrae una cadena de palabras clave que compara con la información recopilada. De ese “cruce de datos” surge una matriz de páginas web que se ordena de una determinada manera. Esa manera es lo que se apoya en el llamado “algoritmo”.
Esto parece el “spoiler” de Dune… o de Matrix. Depende.
Una búsqueda en el mismísimo google devuelve páginas en las que se dan cuenta de 50, 100 o 200 de esas “variables”. Existe toda una industria basada en la “ingeniería inversa” necesaria para adelantarse a las sucesivas actualizaciones del “bot” y del “algoritmo”. Siempre con la misma intención: lograr los primeros puestos.
Existen varios servicios web que miden la volatilidad de millones de palabras clave. Cuando esa volatilidad es alta, ALERTA… alguien ha hecho una cambio: Google o, en menor medida, Bing o Yahoo.
A principios de diciembre, Google dio más fuerza a la identificación de la autoría de una web (Google Author). Automáticamente, los millones de empresas que existen y dicen que venden posicionamiento SEO se lanzaron a la carrera por posicionar esos “autores”. La respuesta de Google no se hace esperar; y multitud de perfiles que han crecido de manera “extraña” en el último mes comienzan a ser “penalizados” en el ranking del algoritmo.
Pero debemos partir de dos premisas claras:
1º ¿Realmente creemos que Google nos ofrece un buen servicio de recuperación de información?
Es decir… ¿realmente creemos que los resultados de google son los más valorables? Si alguien descubre la cura del cáncer y lo publica en su blog… ¿cuánto tarda google en enlazar y posicionar de 1º para una búsqueda del tipo “cura del cáncer”? Y… ¿cómo puede estar seguro Google de si esa “cura” es la buena?
“cura del cáncer” ofrece más de 6.600.000 resultados de búsqueda en 0.28 segundos.
2º Si a lo anterior hemos respondido que sí… ¿sabemos realmente cómo lo hace?
Los millones de robots que se dedican a rastrear resultados de google no fueron capaces de detectar las 2/3 partes de los cambios que sufrió el “bot” ni el “algoritmo” durante 2013. ¿Qué variable se les escapa?
Google está protegiendo su red social “plus”. Evidentemente, cuando uno realiza una búsqueda en google estando “logueado”, los resultados de los +1, los comentarios y el resto de interactividad con ciertas informaciones, tnto propias como de la gente que se tiene en círculos, cuenta.
Pero para evitar que se produzca un bombardeo de +1s constante por parte de millones de bots que se dediquen a velar por el buen posicionamiento de las marcas, la empresa insiste, una y otra vez, en que esa interactividad “no cuenta” a la hora de devolver los resultados “puros”… es decir, las búsquedas que no tienen en cuenta “quién busca”. Pero esto, a día de hoy… ¿es posible?